Los neumáticos correctos para un coche son los originales o derivados alternativos que pueden utilizarse de manera segura sin inconvenientes. Estos son denominados ''equivalentes'', ya que se utilizan para cambiar algunos parámetros de conducción, para mejorar la apariencia del vehículo o ahorrar. Esto último debido a que los neumáticos de menor diámetro son mucho más baratos.
Ventajas al aumentar el diámetro
De antemano, se mejora bastante el agarre como consecuencia del cambio de perfil y anchura. Su acrecentamiento acorta en gran medida la distancia de frenado en carreteras secas.
Ello beneficia en gran medida la rapidez en respuesta y comportamiento al momento de encarar las curvas. La estabilidad se incrementa, tanto como la seguridad.
Por otra parte, también se tiene en cuenta la apariencia. Como consecuencia de un mayor diámetro, se mejora el aspecto del coche.
Finalmente, se encuentra la posibilidad de poder insertar discos de freno más grandes. Dichas modificaciones mejoran en gran medida la eficacia del sistema de frenos.
Desventajas de aumentar el tamaño de las ruedas
En la actualidad, los costes de combustibles son un grave inconveniente económico. En este caso, es el primer problema que se presenta, ya que los neumáticos más anchos tienen mayor resistencia a la rodadura, lo que aumenta el consumo de combustibles.
A su vez, hay grandes probabilidades de que se dañen el neumático y la llanta. A menor altura resultan más vulnerables a los daños en los laterales. Ello sumado a la poca comodidad que conlleva.
